Hoy más que nunca vemos cómo ha crecido el comercio electrónico de bienes y servicios de todo tipo, y la importancia que está tomando en nuestras vidas. Así mismo la pandemia que está viviendo el planeta entero ha afianzado propuestas de negocios que estaban en sus inicios o despertado otra serie ideas y posibilidades que hace un corto tiempo serían impensables de ver disponibles a través de internet o en la economía digital.
Uno de los sectores que ha presentado importantes novedades es el sector de las finanzas, donde desde hace unos años venimos observando como las personas podían comprar en línea acciones y opciones en cualquier mercado del mundo, y construir sus portafolios con diferentes opciones de riesgo y rentabilidad moviendo su dinero de un lugar a otro. También aparecieron los mercados de divisas (Forex), que según algunas fuentes mueve diariamente cerca de 5 billones de dólares en todo el mundo, y donde realizan transacciones desde los grandes bancos y corporaciones hasta personas con pequeñas cantidades de dinero.
Recientemente surgieron las monedas virtuales que en principio se vieron como parte de un “oscuro mercado” y hoy siguen vigentes y en crecimiento, rompiendo paradigmas como el respaldo de economías y la ejecución de políticas monetarias detrás de un tipo de cambio específico, además de la desaparición del papel moneda para dar paso a billeteras virtuales soportadas en la criptografía de datos, algo totalmente impensable hace unos años.
Otras novedades son las economías colaborativas (Crowdfunding) donde se facilita el intercambio de bienes o se promueven ideas que son financiadas por el público en forma directa a través de la red con toda clase de propuestas para el retorno de los fondos, y en otros casos proyectos o iniciativas que buscan donantes para llegar a realizarse con fines netamente altruistas.
A todo lo anterior hay que sumarle la gran cantidad de emprendimientos que vienen apareciendo a nivel global, buscando alternativas de financiamiento para llevarlos a cabo o apalancar su crecimiento con posibilidades de asociación o simplemente ofreciendo retornos que en algunos casos pueden ser exponenciales.
En Colombia adicional a todo lo anterior, ya se empiezan a ver pequeños grupos de inversores privados que evalúan frecuentemente opciones de compañías o ideas que están en busca de financiación y se ven las primeras ferias o encuentros donde se viene consolidando un ecosistema al que pueden acceder bancos, fondos de inversión, empresarios, proveedores, y personas de todo tipo atraídas por la innovación y el mercadeo digital el cual también ha cambiado radicalmente.
Este nuevo panorama también ha revolucionado la oferta tradicional de productos financieros donde se han hecho desarrollos para digitalizar algunos de los más característicos o darles una presentación más moderna animando a posibles interesados que están explorando y cambiando sus hábitos de inversión. Ya no es raro encontrar plataformas donde se negocian facturas, pagarés, libranzas, depósitos en carteras colectivas o títulos como letras que en algunos de los casos están respaldados con garantía real.
Para finalizar y ante este incremento de opciones y novedades las personas tienen que indagar, explorar, consultar y educarse para no poner en riesgo su dinero ya que el panorama actual ante tal explosión de alternativas puede ser confuso y llevar a tomar decisiones sin la profundidad y el análisis que estas requieren.
JUAN DAVID GONZALEZ LAGARMA
CEO – Rentax.co
